Una experiencia con la que exploraremos a flor de piel la estación del año en la que nos encontramos, impregnándonos del territorio. Comenzaremos con un paseo donde reconoceremos flores y plantas silvestres comestibles. A continuación contemplaremos e interactuaremos con el bosque, a través de ejercicios de conexión. Y terminaremos degustando la naturaleza con ingredientes silvestres y de km 0.