Situada tierra adentro, Cervera ofrece a los visitantes un paseo por su historia. Recorriendo el centro histórico de la capital de la Segarra encontramos edificios y elementos que nos hablan de su esplendoroso pasado con una amalgama de estilos que despiertan el interés de los más curiosos. Una ciudad ideal en la que perderse contemplando las murallas del siglo XIV, visitando la Paeria de estilo barroco o andando por sus calles emblemáticas como la Calle Mayor, con sus casas señoriales, el callejón de las Brujas o la Plaza Mayor, que alberga los acontecimientos que se celebran en la ciudad, el más espectacular de los cuales es el Aquelarre de Cervera, festividad que pone de manifiesto el vínculo de la villa con las brujas de la Edad Media. Igualmente, la Pasión Medieval de Cervera, otro gran acontecimiento que reúne más de 500 años de historia, sigue siendo la representación que invita al visitante a regresar a la época del medievo.

Gracias a su estilo neoclásico con parte de elementos barrocos y a su paraninfo, la Universidad de Cervera es uno de los edificios más espectaculares y una visita obligada de la ciudad, que también dispone en su término municipal de un total de 16 iglesias de distintos estilos arquitectónicos, desde el románico de la ermita de Sant Pere Gros y la iglesia de Sant Miquel de Tudela hasta el neoclásico de la de Sant Magí, pasando por el gótico de la iglesia de Santa Maria.