Paso la tarde con varias visitas: las tinas de la Vall del Montcau, unas enormes construcciones de piedra seca en las que se elaboraba el vino a pie de viña cuando la comarca del Bages fue una de las mayores productoras de Catalunya; la localidad de Mura, Pueblo con Encanto que conserva un espectacular núcleo medieval entre sus calles de empedrado y un interesante molino con más de mil años de historia; y el cercano monasterio de Sant Benet de Bages, un conjunto monástico medieval en excelente estado de conservación en el que cuentan cómo se desarrolló la vida monástica entre las paredes de la iglesia, el claustro y las celdas. El complejo ha incorporado un moderno e innovador centro de investigación culinaria, la fundación Alícia, que promueve las bondades de la alimentación saludable; tres restaurantes y una tienda de productos agroalimentarios ecológicos.

Continúo la ruta hacia los alrededores de Solsona, en la provincia de Lleida, donde he reservado noche en una antigua masía situada en la Vall de Lord.