El viaje continúa en dirección norte con la intención de conocer el patrimonio modernista industrial de Terrassa, una de las Ciudades y Villas con Carácter, la masía Freixa con sus arcos parabólicos y hacer una ruta por los jardines más destacados de la ciudad y sus iglesias visigóticas. Es un conjunto patrimonial de excepción, a nivel europeo, en el que podemos hacer un recorrido por varios siglos de la historia del arte.

La siguiente parada es Monistrol de Montserrat, donde cojo el tren cremallera para subir a la montaña de Montserrat, uno de los paisajes más icónicos y hermosos de Catalunya, cargado de gran simbolismo porque allí se ubica un monasterio y el santuario dedicado a la Virgen de Montserrat, la patrona de Catalunya, popularmente conocida como La Moreneta. Los amaneceres en la montaña son impresionantes, por lo que decido quedarme a pasar la noche en la hospedería del monasterio.