Tras seguir la Ruta Miravinya, que nos lleva hasta cinco miradores, tenemos distintas opciones, como conocer la Ruta del Xató, ensalada tradicional catalana, o ir a probar los vinos de malvasía de Sitges, en Costa Barcelona, pero seguimos la Ruta del Vino del Penedès con la idea de hacer dos actividades: oleoturismo para probar el aceite de oliva virgen extra (AOVE) en La Bisbal del Penedès y una cata en El Vendrell de los vinagres que se han servido, durante más de una década, en la gala de entrega de los Premios Nobel. El día finaliza dando un paseo en un carro de payés que parte desde la bodega modernista de Nulles, ya en la Ruta del Vino de la D. O. Tarragona.