Uno de los puntos de paso de este viejo sendero aduanero, que va desde Portbou a Blanes, es la hermosa localidad de Portlligat, a la que accedemos por una carretera panorámica desde el Cap de Creus. En esta modesta aldea de pescadores, el matrimonio formado por Dalí y Gala estableció su residencia durante más de treinta años. En la visita a su Casa-Museo, de arquitectura laberíntica y estancias abigarradas, constatamos que el artista no solo modelaba el surrealismo en sus obras sino también en su propia vida. Pasamos la tarde paseando por la pintoresca localidad de Cadaqués. Al atardecer, buscamos refugio en un restaurante en el que disfrutamos de una buena muestra de cocina marinera y de los vinos de la D. O. Empordà.