Las visitas a la cueva son guiadas y tienen una duración de una hora. Mediante audiovisuales y recreaciones con figuras nos explican cómo vivieron nuestros antepasados. La cueva tiene 3.950 metros descubiertos, que transcurren en buena parte bajo el núcleo urbano de L’Espluga de Francolí. Si la parte histórica sabe a poco, se puede optar por la Ruta Aventura. Vestidos con traje de neopreno, casco y frontal, vamos caminando por el río subterráneo, en ocasiones con el agua hasta la cintura, hasta llegar a la sala del Pou de la Biela, en la que se pasa una especie de sifón antes de dar la vuelta. La ruta tiene una duración aproximada de unas tres horas y la temperatura en el interior de la cueva es bastante estable, entre los 14 y los 16 grados.