Hoy madrugamos para llegar pronto a la Vall de Boí, una de las puertas de entrada al Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici. Lagos de origen glaciar, picos que rondan los 3.000 metros de altura, vegetación como las gencianas y los rododendros, verdes praderas, y fauna tan espectacular como el quebrantahuesos, la perdiz nival, el urogallo o el rebeco, forman parte del paisaje del único parque nacional de Catalunya. Es un paraíso para los amantes del senderismo, con rutas adaptadas a cualquier nivel y público. Nosotros nos decantamos por subir hasta el Planell d’Aigüestortes, en un taxi 4×4 desde la localidad de Boí, para hacer una excursión hasta los fotogénicos estanques de Llebreta y Llong. Tras la caminata nos fotografiamos frente a la espectacular cascada del Sant Esperit y regresamos de nuevo en taxi al valle, donde recuperamos fuerzas con un buen almuerzo a base de carnes, setas y quesos de pastor locales.