Dejamos Tarragona temprano para llegar hasta las Terres de l’Ebre. Empezamos el día con la visita a L’Ametlla de Mar, localidad con algunas de las mejores y más variadas calas del litoral de Catalunya y que forma parte de la marca Barrios y Villas Marineras. En el puerto, que todavía conserva el encanto de los antiguos pueblos marineros, subimos a una embarcación en la que nos equipan con trajes de neopreno para nadar entre atunes rojos del Mediterráneo, enormes ejemplares con un peso superior a los doscientos kilos. La actividad finaliza con una degustación del producto. La gastronomía es uno de los grandes pilares de Terres de l’Ebre, otra buena alternativa al baño con los atunes es continuar hasta L’Ampolla para navegar por la bahía del Fangar, actividad que incluye la visita a las mejilloneras donde cultivan las preciadas ostras y los mejillones, unos productos frescos que dan a probar allí mismo acompañados de una copa de cava.